Amor

A la hora del amor,

su cuerpo crecía

y cubría el mío,

como la sombra de los árboles

cuando se interponen al sol.

Protegida en ella

al despertar de siglos

de sueño profundo,

no fue fácil regresar a la vida.

Permanecía en mi

la estela de su olor.

Eva

El piano

Mi gran pasión es de color negro azabache,

piel tersa y brillante,

como esculpido en ébano.

De figura estilizada y muy sensual,

tiene una hermosa sonrisa 

mostrando sus dientes blancos nacarados.

Siempre soñé con acariciarlo dulcemente

o arrancarle el alma a punta de manotazos.

Escuchar sus lamentos, sus nostalgias, 

alegrías y tristezas…

Estando en el invierno de la vida,

deseo poseerlo con toda la pasión

de mi alma, aún en primavera.

No dejaré de soñar que algún día

mis dedos largos y finos,

toquen lo más agudo de su sensibilidad.

El piano, mi gran nostalgia.

Yvette Ruben

El camino

Muchas mujeres hay en mi,

pero a veces me ausento

y soy mi propio Universo.

Me convence el guión del momento

y elevo mi ser.

Soy actriz o un cuento en lejanas

y fantásticas tierras.

Soy caminante errante

buscando mi canción.

Soy sirena de mares transparentes

o turbulentos,

Esfinge de amor eterno.

Regresar a mi, toma tiempo

y a veces, duele.

Entonces, sigo la luz en el camino

porque no sé,

cuando volaré de nuevo.

Yvette Ruben

Sin tema

Los problemas técnicos en el blog continúan

y solo a veces acepta algunas fotos.

Tal vez, aceptó ésta por mi estado aparente

de desespero.

Paciencia dicen, ante un problema desconocido

y desconcertante.

Pero aquí seguimos esperando que se asome la Luna

a enamorar al sol.

El arte de vivir con arte

La fotografía

Me gusta apreciar el paisaje y también fotografiarlo.

La realidad es un desafío con uno mismo

y la fotografía es quizás, un desafío con la cámara

con lo que quisieras ver y no necesariamente ocurre.

Las dos situaciones son fascinantes

y ninguna reemplaza a la otra.

Hay expresiones y momentos que jamás se podrán capturar

y hay otros, en que el lente es más rápido que nuestra mirada.

Estos conceptos son propios y puedo estar equivocada en mucho,

pero es lo que percibo y me atrae de la fotografía.

Ese gran placer que sorprende al ver en ella,

ese algo que no pasó por la mirada.

Yvette Ruben

Paisaje del alma

No todo está perdido

si aún tengo alma y espíritu.

Es cuestión de esperar,

como los pájaros esperan el amanecer

y las flores el rocío.

Como los bosques esperan la lluvia

y el atardecer la noche.

De espalda en la hierba,

miro al cielo y a las nubes danzar,

la Luna esperará que el sol se acueste.

Frente a mis ojos veo

millones de imágenes y pienso:

Qué más riqueza que la imaginación,

expresar lo que sentimos y con palabras,

describir el paisaje del alma.

Porque los ojos del alma

sienten y ven la realidad

Yvette Ruben A

Leer

Lo mejor en la escritura es lo que se dice entre líneas.

Ahí está refugiado el verdadero sentimiento,

el que se guarda por temor a la verdad.

En el amor, las fantasías son deseos reprimidos,

no son dragones ni ovnis con hombrecitos verdes.

Qué pocos logran rasgar el alma y mostrarla

con todas sus pasiones y desilusiones. 

De libro en libro, esperamos aquel que nos saque

del caparazón y nos obligue a mirar la vida

como una fotografía en crudo,

sin retoques ni suavizantes de la realidad.

La excelencia no razona; escribe con el alma

YvetteRubenA

Error técnico

Un error técnico, me impide publicar por el momento.
Me informan, que es una falla de Gmail y que hay que esperar...

Gracias por su comprensión.

El arte de vivir con arte

Oye amigo

Oye amigo,

quién te engañó y te dijo que eres

el único en la faz de la tierra ?

Despierta, porque ni siquiera

puedes ser una estrella en el cosmos,

o un sol de madrugada cuando la Luna

se esconde.

Verdad hay una sola y nadie es dueño de ella.

Mira a tu alrededor y todo es vida,

no la destruyas.

Agradece con emoción, el amor que te ofrecen

y no lo cuestiones, porque quizás algún día,

te darás cuenta que tuviste en tus manos

lo mejor de la vida y que, como una mariposa

hermosa y ágil, se escapó de entre las manos.

Yvette Ruben A

La búsqueda

Ante la pasividad del momento,

corriendo como hormiguitas laboriosas,

se alejan y ausentan de mi las palabras.

Descubro nuevamente el poder del silencio

y la reflexión.

Hay que indagar en el profundo mar interior

que acaricia mis sentimientos.

Encuentro muchas respuestas pero no la mía

y esa, es la que rige el camino a seguir.

No son confiables las soluciones

cuando se está ante un paredón amenazante.

Visto el traje que hilé con mis propias manos

y no es precisamente de seda.

Hay que seguir andando y quizás,

encuentre la respuesta en el camino.

YvetteRubenA

Hoy domingo

Sad Heart -Sivan Talmor from Karni and Saul on Vimeo.

Violencia

Quieta está la naturaleza en su labor diaria,

pero el hombre insiste en la violencia.

Qué le pasa, qué vacío tiene en el alma

sin permitirle estar en paz?

Por qué y cuándo nos olvidamos del amor?

Por qué tanto odio, tanto materialismo?

Oigo los pájaros trinar en el amanecer,

veo las flore abrir sus pétalos y su virginidad,

siento las gotas musicales de la lluvia

y la pasión del sol en el ocaso.

Y el hombre, qué?

No oye, no ve, no escucha?

Se queman sus manos si lee la biblia,

la poesía, el amor?

Quien lidera el odio y por qué?

Cuándo desapareció el sentimiento?

YvetteRubenA

Mi ciudad

Vuelvo a ti ciudad mía,

de cuerpo frío

y corazón ardiente.

Todos hablan mal de ti,

inclusive los que viste nacer.

Y es que eres impredecible,

desordenada, poco aseada

y arrogante.

Te salvan las pocas montañas

y bosques que aún te bordean

y la elegante herencia

de lo que fuiste alguna vez.

De vida alegre, eres de todos

y de nadie, pasión de muchos.

Eres mi ciudad

y regreso a tus brazos,

porque te quiero.

YvetteRubenA

Las montañas

Majestuosas e imponentes,

qué pensarán las montañas

de los que estamos abajo,

especialmente, a la orilla del mar.

Qué dirán sobre el desperdicio de agua,

la tala de bosques, la calefacción,

el aire acondicionado...

De las masas de carros en las calles

y las multitudes en los aeropuertos.

Del ruido de música chillona

para callar pensamientos.

Qué somos para las montañas,

quisiera saberlo.

YvetteRubenA

Alfred Hitchcock

Tras la persiana que formaba

con la palma de mi mano sobre los ojos,

con taquicardia y emocionalmente

descompuesta, miraba las películas

de Alfred Hitchcock.

Su genialidad, me convertía en adicta a ellas. 

Tomé estás fotografías a la orilla del mar

y al verlas en el computador, me recordaron 

la película, Los Pájaros. 

No era mi intención el drama en ellas,

pero la luz, el momento y quizás el ángulo,

contribuyeron a que fueran, en mi concepto,

especialmente bellas.

Yvette Ruben A

Flores y poesía

                                           ¡Setenta balcones y ninguna flor!

Setenta balcones hay en esta casa, 

   

setenta balcones y ninguna flor.

¿A sus habitantes, Señor, qué les pasa?

¿Odian el perfume, odian el color?

La piedra desnuda de tristeza agobia,

¡Dan una tristeza los negros balcones!

¿No hay en esta casa una niña novia?

¿No hay algún poeta bobo de ilusiones?

¿Ninguno desea ver tras los cristales

una diminuta copia de jardín?

¿En la piedra blanca trepar los rosales,

en los hierros negros abrirse un jazmín?

Si no aman las plantas no amarán el ave,

no sabrán de música, de rimas, de amor.

Nunca se oirá un beso, jamás se oirá una clave…

Setenta balcones y ninguna flor!      

      Baldomero Fernández Moreno

Entre cielo y mar

Despido el mar, mi obsesión.

Me atrae como a las sirenas,

con su vestimenta caprichosa

y temperamento cambiante.

Del mar al cielo y del cielo al mar,

es vivir toda una aventura

de magia y colores inesperados.

Lo vigilo y él lo sabe;

posa como en una pasarela

y le encantan las cámaras

porque es vanidoso.

Es una tentación,

pero mi piel

ya no resiste sus caricias bajo el sol.

Por unos días, estará en mis pupilas,

cada amanecer, de todos los días.

YvetteRubenA

Confusión - Enero 2-2019

Todo pasa en tan solo unas horas.

La euforia, el bullicio y la excitación,

quedan atrás en la memoria; fresca aún.

Todo continúa para bien o para mal,

con expectativas o sin ellas.

Está de frente la vida y su realidad.

Liviana para algunos y rocosa para otros.

Tanta promesa, tantos propósitos

y tentativas para cambiar lo que nos ata,

huir de lo que nos hace daño,
de las personas tóxicas,

aumentar la auto estima,

insistir en mantener la integridad…

Me inquieto y me pregunto:

¿Qué hacemos con el yo interno,

tan desprestigiado y repudiado
pero necesario?

¿Dejarlo en el closet del año pasado

y crear uno nuevo?

Estoy confundida…

¡Feliz año!

YvetteRubenA