Es extraño el amor al arte, es una adicción difícil de acabar.
Si tratas de hacerlo poco a poco, no funciona y si es de tajo,
el síndrome es inevitable y vuelves a él.
Y por qué no, si el arte está en todas partes y si agudizas la mirada,
no existe rincón en donde no lo haya.
Así que, aquí estamos...
Yvette Ruben