La verdad, no entiendo eso
de encontrarse a si mismo,
tan de moda hoy en día.
Me encontré
desde el día que nací
en la casa de una planta,
luminosa y alegre.
Mujeres iban y venían
en constante alboroto.
Fue el primer y único
grito de mi vida.
Lo recuerdo perfectamente,
aunque el mundo cuerdo
diga que eso no es posible.
Desde ese ayer,
soy la misma de la casa rosada
con solar atrás y que
a ningún discurso de auto estima,
se le ocurra decirme que no.
A partir de ese día,
sigo siendo Eva, la del Paraíso.
YvetteRubenA
